Bacalao Confitado

Descongelar a temperatura ambiente los filetes de bacalao durante 2 horas aproximadamente. Cuando estén, secar si tienen humedad y reservar.

Disponer una olla o cazuela alta. Echar la cantidad de aceite de oliva suficiente para que el bacalao quede cubierto. Poner al fuego y cuando el aceite esté templado, aproximadamente a unos 80ºC, echar los dientes de ajo, sin pelar pero ligeramente aplastados, y las hojas de laurel. A continuación introducir los filetes de bacalao con la piel hacia abajo y mantener a la misma temperatura durante 20 minutos para conseguir el bacalao confitado. Pasado este tiempo, retirar el bacalao a una fuente y mantener caliente.

Preparar el puré de garbanzos:  Escurrir los garbanzos, refrescarlos con agua para eliminar cualquier resto y reservar. Poner una sartén al fuego con 3 cucharadas de aceite, echar la cebolla picada y dejar cocinar a fuego medio hasta que esté translúcida. Agregar el cilantro, remover, incorporar los garbanzos y una pizca de sal. Dar unas vueltas para que se calienten los garbanzos y verter todo en un vaso de batidora. Agregar una cucharada del aceite del Bacalao Confitado y triturar. Reservar.

Poner al fuego un cazo con agua, una pizca de sal y llevar a ebullición. Echar las espinacas, sin descongelar, y cocer durante 10 minutos a partir del momento que vuelva a hervir. Escurrir bien y reservar.

Freír el bacon en una sartén con un hilo de aceite de oliva. Cuando esté dorado añadir lentamente las espinacas y saltear durante 1 minuto. Reservar.

Es importante emplatar nuestro Bacalao Confitado con una presentación vistosa. Poner el bacalao en el centro del plato, a un lado colocar una buena porción de espinacas con bacon y al lado contrario una buena porción de puré de garbanzos. Adornar con algún ajo y hoja de laurel, y servir muy caliente.